Vivimos en una sociedad de consumo. El consumo reactiva la economía. Más economía equivale a más y a mejores puestos de trabajo. Cuando la gente tiene más dinero compra más, lo que genera aún más consumo. Etcétera etcétera.
OK
Entonces, si hay menos consumo la economía se estanca y el empleo se destruye, ¿no?
Y si te digo que esto no es así.
Te pongo un ejemplo de objeto barato:
Mi hijo tenía una mochila de dinosaurio que le había regalado su abuela. Le costó 3 euros. Analicemos la mochila:
- Material principal: Poliéster, 100% sintética.
- Otros materiales: Cremallera y trabillas de plástico.
- Fabricación: China.
- Marca: Desconocida.
A la semana se le descosió un tirante.
Se lo volvimos a coser y poco tiempo después se le rompe la lengüeta de la cremallera, otra reparación.
Al mes se le rompe una trabilla de un tirante y ya fue la gota que colmó el vaso.
Tiempo de uso antes de rotura fatal, 5 meses.
Mochila al contenedor de reciclaje de ropa y niño bañado en lágrimas.
Según la sociedad de consumo, ahora tocaba repetir la misma maniobra, mochila barata y me mala calidad para repetir jugada.
PUES NO.
Ahora te pongo un ejemplo de objeto ¿caro?:
Esta vez quería algo de mayor calidad que le durase más tiempo, y la ganadora fue una mochila de rebajas de un comercio local que me costó 14 euros (estaba a mitad de precio), de una marca Belga con fabricación en China y 100% algodón orgánico.
Tiempo de uso: 2 meses y aún parece salida de la tienda.
Conclusión:
La primera mochila era de materiales sintéticos, fáciles de conseguir y baratos. La mano de obra barata, extranjera y me atreveré a insinuar que con algún tipo de explotación del trabajador.
La segunda era de materiales naturales, con el sello GOTS, avalada con la marca de un fabricante y mano de obra de gran calidad (aunque sea dentro del mismo país que la barata).
CONCLUSIÓN SOBRE NUESTRO MODELO DE CONSUMO
Lo importante no es consumir más, sino hacer un consumo responsable, comprando cosas de mejor calidad.
Cuando compras algo de calidad ocurre lo siguiente:
Más calidad implica un proceso de elaboración que culmina en el departamento de calidad de una empresa. Dichos departamentos los componen generalmente personas, no máquinas, que velan porque sus productos tengan la calidad prometida y, de ser necesario, los someten a estrictas pruebas. En este departamento trabajan muchas personas.
Los materiales que lo componen no son low cost, sino otros mejores que han sido cuidadosamente seleccionados y extraídos de la Tierra por varias manos. Una vez más, aquí se generan más puestos de trabajo.
Normalmente los mejores productos son los que están compuestos de materias primas naturales, ya sea algodón en lugar de poliéster, madera maciza en lugar de aglomerado más capa de melamina, o una viga de metal en vez de un pilar plástico de PVC. La obtención de estas materias primas y su posterior procesamiento crea muchos puestos de trabajo.
Ahora reflexiona en que un producto de pésima calidad no posee nada de esto, por lo que ¿dónde se crean y dónde se destruyen más puestos de trabajo?